Las tarjetas navideñas: transcripción

Mientras la mayoría de los ciudadanos disfrutan de las vacaciones de Navidad, el cuerpo de Correos multiplica sus medios para que la felicitación pascual llegue puntualmente a su destino.

Navidades de 1955. A las oficinas de Correos de toda España llegan 12 millones de felicitaciones navideñas. 55 años más tarde y arrastrados por las nuevas tecnologías sólo menos del 10% de los españoles felicitan la Navidad con un christmas. Y para que estos románticos no pierdan la tradición hay quienes trabajan cada año en diseños diferentes y novedosos. Cristina es una de ellas.

Cristina Luengo:
Busco adornos que sean planos o que tengan muy poco... muy poco volumen, que se puedan espachurrar en los sobres. Éstos por ejemplo son los típicos abetitos que hay en las maquetas.

Abetos, estrellas, angelotes y hasta tapones de champán han sustituido a las tradicionales imágenes religiosas y como si de joyas literarias se tratase, en un rincón de la Biblioteca Nacional se guardan también cientos de christmas que nos llevan a los orígenes de esta tradición. Inglaterra, 1843.

A finales del siglo XIX empiezan a aparecer en España este tipo de felicitaciones que tienen una estética mucho más barroca. En este caso, por ejemplo, se trata de una felicitación en varios planos y con un paisaje navideño.

Comenzaron siendo un capricho de las élites y con el desarrollo del correo postal se extendieron a todas las clases sociales. Su estética también ha evolucionado. Estas Navidades, el último grito son los christmas troquelados.

Cristina Luengo:
Una técnica láser para cortar el papel que permite que se quede transparente. Son cosas como éstas. Esta corta parece una filigrana.

En más de siglo y medio los mensajes navideños apenas han cambiado. La intención tampoco. ¡Feliz Navidad!

Diccionario de la RAE: